lunes, 2 de marzo de 2009

La decepcionalidad española


Trataré de reflejar a continuación algunos de los puntos a mi parecer más sangrantes, que vienen recogidos en un escandaloso artículo de opinión de El País publicado recientemente:

http://www.elpais.com/articulo/opinion/excepcionalidad/espanola/elpepuopi/20090218elpepiopi_13/Tes

Eso sí, recalcando desde el primer momento que el artículo en su totalidad constituye una brutal ofensiva a la comunidad española de inmigrantes.

Esta parrafada malsonante me parecería aberrante saliera de quien saliera semejante apología del egoísmo, el utilitarismo desalmado y la insolidaridad. Pero si tengo en cuenta además, que ha sido escrito por dos catedráticos de la Complutense, entonces no encuentro calificativo alguno para denominar no ya al contenido en sí, sino a esas personas “cualificadas” que ostentan dicho cargo público y que se presupone sabe lo que dicen y porque.

Básicamente, estos maliciosos mequetrefes pertenecientes a altas esferas del ámbito universitario, incitan descaradamente a la sociedad civil al cuestionamiento de la conveniencia del ya limitado repertorio de derechos sociales que teóricamente nos iguala a españoles e inmigrantes.

Se refieren concretamente a la salud y la educación como derechos fundamentales con rango de universales en nuestro ordenamiento jurídico y a los que pueden acceder de manera muy sencilla.

Pero que frialdad, que inhumana hipocresía;

El derecho a la educación y a la asistencia sanitaria que los autores consideran generosas prestaciones de nuestro “robusto” estado de bienestar, son derechos humanos reconocidos y ensalzados por esta misma nación en la presumida Declaración Universal de los Derechos Humanos. Debiendo de funcionar teóricamente en todos los países que refrendaron aquella, de manera independiente a cualquier posición legal que otorgue cualquier régimen de residencia. Por desgracia y tradición, no en todos los países que en su momento avalaron esta hermosa declaración de intenciones, tales derechos fundamentales han sido llevados a la práctica.

Por otro lado, describen a estos derechos como esos ingredientes de la receta que convierten un apetitoso plato en irresistible. Refiriéndose a España como a un suculento y opulento manjar.

Esta frase más bien la emplearía yo para referirme a los intereses que incitan y constituyen los verdaderos estímulos que mueven a esa manada de empresas españolas deslocalizadas, que salvajemente se instalan en muchos de los países de los que “casualmente” proceden gran cantidad de inmigrantes. No puedo evitar pensar que la concepción que estos individuos tienen del colectivo de inmigrantes, es la más parecida posible a la de parásitos usurpadores. Sin embargo, tampoco puedo evitar trasladar tal concepción, a ese grueso empresarial en auge que se asienta en aquellos países en los que, ahora sí, la excepcionalidad de su desregulación y flexibilización del mercado laboral, posibilita un enriquecimiento desmedido de estas a costa de insultantes retribuciones y precarias condiciones de trabajo. Las mismas condiciones que juegan un papel tan importante a la hora de perpetuar situaciones de verdadera desesperanza y anomia. Y las mismas situaciones que han ido progresivamente creando un caldo de cultivo propicisimo para abandonar sus países en dirección a nuestra copiosa y embaucadora Europa.

Quizás podrían plantearse estos “intelectuales” de pacotilla, que una de las múltiples claves que tanto les preocupan a la hora de explicar esa excepcionalidad española en cuanto a recepción de flujos de la que hablan, puedan hallarse precisamente en inclementes realidades como la mencionada y otras tantas nada halagüeñas de las que somos o hemos sido cómplices.

Puede que quienes si debieran hacer un mayor uso del sistema sanitario público, sean precisamente predicadores como los que aquí nos ocupan. Puesto que parece ser que padecen de cierto alzhéimer histórico preocupante, que si de mí dependiera sería motivo suficiente de inhabilitación en su ejercicio propagandístico.

Yo les recetaría que les echaran un vistazo detenido a los libros de geografía e historia de sus pequeños. A los primeros para visualizar la posición estratégica que supone España para los africanos que quieren vivir el sueño europeo, y a los segundos para remontarse unos 50 años atrás, cuando desde aquí zarpaban cayucos a Latinoamérica. Sin olvidar los capítulos del colonialismo español, que les hagan entender los lazos históricos y esa similar no casual forma de hablar que nos une a la comunidad hispanoamericana (por algo los llamamos así) y que actúa como un gran facilitador que induce a escoger España como país de destino en lugar de otros. Ni los numerosos estudios de inmigración y mercado laboral que atestiguan la notoria demanda de mano de obra “no cualificada” que ha experimentado España y las condiciones denigrantes en las que el empleo de inmigrantes se ha venido y viene desarrollando. Les diría también que se dieran una vuelta por algún parque, y observaran cuantas abuelas y abuelos se encuentran acompañados por una inmigrante a cualquier hora del día. O que de vez en cuando miraran a la cara de uno de los camareros que les ponen en la mesa el plato, para sentir la paradoja de no querer servir al que les sirve.

Por último les invitaría a darse una vuelta por Almería. Yo misma estaría dispuesta a acompañarlos al sinfín de cortijadas y barriadas periféricas repletas/ no plagadas como dirían algunos, de inmigrantes que malviven en pésimas condiciones de habitabilidad, sin distinción entre trabajadores contribuyentes a la arcas de estado, y contribuyentes invisibilizados explotados.

Una vez seguido este tratamiento que persigue recobrar la tan saludable sensibilidad humana, sería bueno que hicieran unas cuantas reflexiones tratando de estimar cuantas de esas personas tienen un contrato y cotizan como buen hijo de obrero a la seguridad social, y cuantos no por no convenir a la persona en cuestión que goza de su atención o servicios a un módico precio. Por no darles de alta, y porque si uno no acepta 3 euros la hra haciendo de todo, ya vendrá otro detrás en peor situación que sin otra opción a la vista tenga que aceptarlo. Y ojito con reivindicar algo, porque el chantaje ante un posible despido o deportación, acalla cualquier intento de aspiración a mejorar. Todo ello sin tener en cuenta cuantas de esas personas exponen su salud a numerosos y variados riesgos laborales, que derivan de la escasa o nula prevención de los mismos.

¿Qué sugieren? ¿Qué ni siquiera estos últimos que no pueden gozar de ninguna prestación ni ayuda estatal por no reconocerse su vida laboral, puedan al menos ver garantizada su salud? ¿O que los que vienen cotizando a la S.S y salvando nuestro sistema de pensiones amenazado por la baja natalidad tampoco puedan hacerlo?

Al hilo de lo anterior, es también increíble ver como pone de ejemplo a Italia como país que son similares características en la pirámide poblacional, no ha atraído a tantos inmigrantes como España en los últimos años. Pero que disparate usar de referente modélico precisamente a Italia. Todos sabemos cuales viendo siendo las directrices políticas de este país en materia de inmigración, y cuales también sus consecuencias. A día de hoy, estamos presenciando desde la otra orilla un endurecimiento indiscriminado de la gestión de flujos italiana y de sus políticas crimizalizadoras, que lejos de promover la integración y la convivencia, refuerzan actitudes xenófobas y hostiles hacia los inmigrantes. ¿En este ocasión que insinúan? ¿Qué la excepcionalidad española se acabaría siguiendo aún más sus pasos?

Como si aquí fuéramos santicos y solo concedamos no reprimamos.

En realidad no son tan distintas tales políticas a pesar de intentar contrarrestarse en sus efectos o encubrirse con el acceso a la salud y la educación, como algunos quieren hacer creer. Las formas son distintas, porque el discurso de Berlusconi es más feroz, pero en el fondo no hay tantas diferencias. En España el acoso y la persecución policial es permanente. Ejemplo de ello es la estrenada ordenanza policial en Madrid donde se establecen cupos de detención y expulsión de inmigrantes por el mero hecho de pasear por las calles. Priorizando como no al colectivo marroquí por aquello de economizar tiempo y gastos de repatriación. Otra muestra serían las pésimas condiciones en las que se encuentras los sin papeles en los CIES, y el maltrato que reciben y han recibido muchos de ellos.

En cuanto al supuesto conocimiento exhaustivo antes de partir de las posibilidades que ofrecen los países de destino, cabe decir que con frecuencia, las expectativas e ideas preconcebidas que puedan existir en el imaginario colectivo de los inmigrantes antes de iniciar su proyecto migratorio, suelen con mucho no corresponderse con la cruda realidad que encuentran al llegar aquí. Otra cosa bien distinta, es que una vez aquí conozcan y valoren positivamente estas dos prestaciones. Aunque por supuesto habrá gente que conozca estas ventajas previamente, pero no como para ser resultar las claves decisivas.

Algo tremendamente contradictorio que permite despejar cualquier posible duda acerca del tono juicioso peyorativo que se desprende desde el primer párrafo, es cuando por un lado dicen que no entran a valorar argumentos a favor o en contra de estos derechos y poco después hacen la siguiente aseveración; Suena duro, antisocial e injusto, pero esa reforma (homologarnos al resto de los países de la Unión Europea y reformar los requisitos de empadronamiento que otorgan amplios derechos a los inmigrantes por el mero hecho de dicha inscripción) pondría fin a la excepcionalidad española en materia de inmigración.

Esta última frase que repiten en varias ocasiones y que da título al presente artículo, es una clara muestra de su ingenuo cinismo que ni siquiera alcanza a ser políticamente correcto. Además, va acompañada de expresiones a las que ya estamos acostumbrados oír hablar y tergiversar.

El conocido “efecto llamada” al cual simplifican en cuanto a su causalidad, y con el que pecan de un acusado reduccionismo interpretativo; vienen aquí por nuestra salud y educación. Va asociado por desgracia en la ingente literatura de las migraciones que ha ido gestándose en estos años tanto a nivel académico y de investigación como periodístico, a otros términos nada integradores sino más bien amenazadores; oleada, avalancha…

Para concluir, decir que no se pueden lanzar hipótesis de esta calaña tan a la ligera, y mucho menos en un medio de tal difusión como es el país, ni siquiera estando basadas en una mínima constatación empírica (que no es el caso). Hay que ser cautos a la hora de lanzar mensajes a la palestra pública respecto a un tema tan peliagudo y que despierta tantas susceptibilidades y controversia en la opinión pública como las migraciones. ¿o es que alguien pretende alentar a que se produzcan de nuevo en España episodios tan trágicos como los ocurridos en aquel hito histórico que supuso El Ejido en el 2000, o los que vienen sucediéndose en Italia en los últimos meses? Se me ocurre también pensar en perversas legitimaciones de discursos peligrosamente fascistas. Este artículo es carne de cañón para alimentar la teoría y la practica xenófoba de nuestra derecha más deplorable.

PROXIMAMENTE TRATARÉ DE REFLEJAR Y EXTRAPOLAR ESTA PUBLICACIÓN A LA REALIDAD ALMERIENSE EN LA QUE TANTO QUEDA QUE DECIR Y HACER POR ESTOS DERROTEROS.

viernes, 6 de febrero de 2009

CreaR es CreeR...


Las líneas que vienen a continuación, son muy especiales para mi. Conforman uno de los regalos más preciados que me han hecho, en mi ya no tan corta vida. Intento que literalmente, me acompañen siempre por los diferentes techos que voy rulando, y simbólicamente por la acera de la intimidad o por cualquier otra acera que vaya cruzando.Quiero dedicarselas con muchísimo cariño a un amigote osuno que estuvo sobretodo presente en otra epoca y lugar, pero al que nunca he olvidado y siempre he admirado. Gracias señol javiel...ahora lo veo desde aqui y ahora, y "creo" que esta frase nos unió y dió a conocer un poquito más. Una frase, al igual que una imagen, puede valer más que mil palabras... En este caso, tu escogiste unas muy apropiadas para acompañar a las mías. Creimos y creamos juntos...y espero que no dejemos de seguir haciendolo haya donde estemos y sea como sea la forma en la que lo manifestemos.

Si no que penilla no?


Fue todo un alago inspirarte en aquel momento y me regalaras de aquella forma el fruto de tu inspiración.


CreaR es CreeR...


Esta tarde anduve por la acera de la intimidad y descubrí que por una vez no andaba solo, que delante de mi iban miles de sombras guiándome hacia aquello de místico que tiene todo acto de creación. Algunas iban cogidas de la mano, otras esperaban sentadas a que pasara elel tren de la inspiración, otros desgraciadamente regresaban con la cabeza baja pensando que aquel camino no era el suyo. Entonces no les dije nada, hoy les diría CREAR ES CREER.

Simplemente esa era la respuesta que yo hubiera esperado aquella vez que baje por la calle en soledad. Pero quizas, al llevar mi cabeza incrustada en el pecho, no habría podido escuchar tan maestro consejo, o más bien no lo podría haber entendido. Crear es un acontecimiento demasiado difuso como para mirarlo de cerca. en el que ni siquiera el momento originario está claro, en el que funcionan a la vez acontecimientos dispares e independientes, como son el acto en si y la posterior exposición a la que queda expuesto nuestro propio parecer.

Quien ha creado alguna vez, bien conoce esa verguenza que se siente al sentirse observado desde donde nada se ve, ese pudor que te vigila y a veces te hace guardar versos, o estrofas, o dibujos, o un sostenido...porque te hace ver una caricatura de ti mismo creada por tu propia inseguridad.

A todas estas frustaciones que nos rodean, debemos mirarlas a la cara y decirles:

¡Cre0 en lo que creO!

Pero siendo este razonamiento capicua, estando dotado de sentido desde antes de pensar a que conjugación pertenece esta forma de "creo"Si, ese es el mensaje, el acto de crear en nuestra lengua está ya si no precedido, si condicionado por una creencia, y toda creencia será para mi a partir de ahora un acto de creación.Pues ¿de que otra forma puedo observar el mundo para luego crear que a partir de unas creencias?. La creencia "CreeR", es el acontecimiento de origen de todos mis actos creativos, y de una u otra forma Creer es CreaR.

Gracias Z, hoy eras tu quien me acompañaba en la acera de la intimidad.

jueves, 5 de febrero de 2009

Reee-conectando...pipipipiiiiiiiiiii

Queridos 4 gatos amig@s y desconocid@s amigables, que hasta la fecha habeis visitado mi blog.
Ayer fue un gran día para mi a nivel personal y laboral. Justo entré al blog, que obviamentemente tengo bastante abandonao desde hace unos meses, y encontre un comentario reciente de alguien que quiso meterme un poco de caña. Sencillamente me encantó! además no se quien fue, pero sea quien sea lo hizo en el mejor momento en que podía haberlo hecho.
La palabra desidia me pellizco. Aunque no creo que sea ese el motivo por el que puse en pausa mi blog, si que a veces me acecha peligrosamente, esa odiosa sensación de pereza por hacer algo que me satisface. Son mis contradicciones, una de tantas... Al igual que algunos de mis muchos defectos pueden ser; focalizarme demasiado en algo y descuidar otros aspectos importantes, darlo todo o nada, no calcular el tiempo, funcionar solo bajo presion max, ser desorganizada...
Suele dárseme bastante bien eso de reconocer fallos personales ( no siempre verdad amigos? verdad mama?), pero otra cosa bien distinta es dar el paso para cambiarlos. Ando precisamente en ese punto...ser capaz de cambiar lo que me limita o incluso incapacita, a la hora lograr mis aspiraciones y proyectos a corto-medio y largo plazo.
Me he desdibujado demasiadas veces sin resultados palpables, y ya es hora de que cobre forma y consistencia todo esa introspeccion de por si sola vacia.
Las declaraciones de intenciones no sirven de nada si no van acompañadas de acciones tangibles, si no que se lo digan a la ONU y a sus preciosos objetios del milenio.
No es chica mi tarea...y en ese proceso ha habido y me temo que seguirá habiendo, repercusiones y consecuencias varias.
Lo del blog es una claro ejemplo de todo esto que cuento. Acabo de terminar trabajo social "a mi manera". Soy una diplomada recién salida del horno, con toda la carga emotiva, de incertidumbre e inseguridad que eso puede conllevar.
Crear este blog fue una forma de ponerme a prueba en cuanto a compromiso conmigo misma y con lo que me importa, pero si por algo no quise darle demasiada difusion por el momento, es precisamente pk me conozco.
Quizas debería haberlo advertido...pero en un momento dado pensé, que sería mejor esperar a que se resolvieran ciertas cosas para proseguir esta idea que tanto me apasiona.
Creo que ha llegado ya el momento, y todas las casualidades y puertas que se me están abriendo apuntan a que asi sea.
Me siento con mucha fuerza y ganas de transmitir y contagiar mis ganas por actuar. Eso si, me sentiría mucho mejor acompañada en esta ardua tarea de transformar y transformarme.
Sé que toda esta potencia e ilusión por querer cambiarme a mi y cambiar el mundo "al menos mi mundo",corre el riesgo de desvanecerse ante demasiados tropiezos que se que me encontraré, y tristes realidades que me achantaran. Pero por ese mismo quiero aprovechar este momento en el cual me siento tan empoderada, para que cuando me flaqueen las fuerzas o aceche la desidia, tenga materia sólida a la que agarrarme.

Gracias anónimo. ¡nos vemos muyyy pronto!

lunes, 8 de diciembre de 2008

“Confraternizando”



 

Llega donde la gente,    


 

Anda entre la gente,


 

Aprende de la gente,


 

Labora al lado de la gente


 

Empieza con aquello que ella sabe


 

Construye sobre aquello que ella tiene,


 

Enseña mostrando, aprende haciendo


 

Que tengas un patrón y no una muestra,


 

Un sistema y no una colcha de retazos,


 

Una obra integrada y no más partes sueltas


 

No para conformarse sino para transformarse,


 

No para aliviar sino para liberar


 

TAO TE CHING -  LAO TSE


 


 


 


 


 


 

jueves, 16 de octubre de 2008

Popurri sobre inmigración y nuestra condición



La inmigración...
Ese tema tan sonado, del que estamos acostumbrados oír hablar con frecuencia; ya sea en los medios de comunicación o en la calle, bien en positivo o en negativo. Pero en cualquier caso, la in-e-migración constituye hoy día una realidad dinámica y diversa, presente en el mundo entero, en nuestro país y más concretamente en nuestra provincia. Y es precisamente en Almería, donde transcurre la actividad de muchas asociaciones de inmigrantes y pro-inmigrantes, como ACIA (asociación por la convivencia intercultural en Almería), que con mayor o menor grado de conexión entre ellas, trabajan en este ámbito para intentar cada día estar más cerca de esa sociedad anhelada por tantos; inmigrantes y autóctonos. En la que pueda llegar a ser posible el entendimiento, conocimiento y enriquecimiento mutuo de todos por todos, independientemente de la procedencia, cultura, nivel económico, sexo, orientación sexual, color, olor…


Una sociedad más justa e igualitaria, que aunque estemos hartos de escuchar como se pervierte el significado de palabras como estas, puestas en boca de los grandes mequetrefes que manejan el autentico cotarro, podamos llegar a retomar el verdadero significado de las mismas, y ponerlo en practica dejando a un lado la retórica.

Soy consciente de que a muchos, lo que digo puede parecerles una utopía o tontería, sin embargo, lo único que me produce pensar el que haya gente que piense así, es tristeza e impotencia. Al igual que impotencia, es lo que probablemente le produzca este mundo a muchos de los que piensan, que poco pueden cambiar ya las cosas. Pero la diferencia entre la impotencia de los que creen que nada puede cambiar y los que creemos que “algo”si que puede y tiene que cambiar, es que el 1º tipo de impotencia es una sin potencia y bastante cómoda. Ejm: Me siento impotente cuando veo en la tele las insensibilizadoras imágenes con sus insensibilizadores comentarios sobre este insensibilizado mundo y sus tremendas injusticias que no están en mi mano resolver. En ese momento, siento penica y empatizo con los pobres desgraciados de este mundo, pero al momento siguiente apago la tele y...si te he visto no me acuerdo.

O lo que es peor; cambio de canal, y me abstraigo de los problemas mundiales y los míos personales, dejándome absorber por vidas ajenas de la casa de gran hermano, o de la cuadrilla en aumento de famosos parásitos, cuyos problemas afectivos, económicos, de justicia… si que merecen toda mi atención.Esta común actitud, responde a la lógica de nuestro mundo occidental; rápido y saturado de información y múltiples cosas que hacer, ver, oir...

Y tiene sentido, en el sentido de que si uno está más liao que un trompo con sus historias personales de trabajo, estudios, relaciones, ocio, etc. ¿Como va a uno a plantearse poner su granito de arena para cambiar algo?.Si la primera y desalentadora lección que nos enseñan, es que cada uno tiene que sacarse sus castañas del fuego sin esperar nada de nadie, y lo que parece más grave de todo; guerras, desastres naturales, violaciones de derechos humanos… aparentemente quedan tan lejos de nosotros. Y encima, aquí y ahora tengo que hacer frente a una macro-hipoteca para pagar una micro-casa y todo lo que ira dentro de ella; lava-seca-tosta-frei-aspira-exprimi DORA, tv plasma, tv y cámara digital, dvd, playstation, home cinema, aire acondicionado, internet, webcam, portátil, pda, papapapa...

Todo lo que, “así me lo aprendí yo” necesito para vivir, y para que el poco tiempo en que no estoy trabajando para conseguir todo lo anterior, pueda emplearlo en estar entretenido, ocupado o relajado con lo que tanto me ha costado ganar. Y si de paso, mientras hago uso y amortizo todas mis maquinitas, puedo evadirme unas horas y no pensar en lo que mañana tendré que trabajar para seguir pagando cosas, pues entonces de lujo.

Los que me conoceis bien sabeis que no me gusta generalizar ni etiquetar, pero a veces una generalización relativa resulta muy gráfica

Paso ahora al 2º tipo de impotencia, que caracteriza a personas cuyo estilo de vida no tiene porque distar mucho del anterior, y cuyas necesidades tampoco tienen porque ser otras, por que… “así también se lo aprendieron ellos”, a lo sumo, a lo mejor tienen dilemas morales consumistas, pero se resuelven fácil, obteniendo en lugar de 25 makinitas, solo 10, y rellenando el resto de vacíos tecnológicos hasta llegar a 25, subiendo a la casa del vecino, o pidiéndole a pepe que te deje ver el partido del jueves en su tele pepino. Sin embargo, esta gente, puede que al apagar la tele y sentirse igualmente impotente, sepa traducir y trasladar activamente dicha impotencia a su contexto más cercano. Donde también sobran los motivos para sentirse así, sin necesidad de ver en la tele la cruda realidad del tercer mundo. Estamos rodeados de crudezas y durezas, algunas no nos afectan directamente y por ello son más difíciles de ver y movilizarnos por ellas, otras en cambio las sufrimos en 1º persona, y ni siquiera por estas somos capaces de hacer algo o plantearnos la posibilidad de cambiarlas.

Todos, los más y los menos activistas, tenemos problemas de trabajo, vivienda, relaciones sociales… todos, en mayor o menor medida, vivimos acelerados y atrapados en este frenético ritmo de vida que nos ha sido impuesto. A pesar de vivir en el cascaron de la abundancia, donde se presupone que podemos encontrar todo lo necesario para vivir, todos andamos justos de tiempo, de dinero…Es ese mismo ajetreo imparable que marca nuestras vidas y que apenas deja hueco para la reflexión, el causante de muchos males inmateriales que constituyen lacras sociales en este postmodernísimo mundo nuestro; Estrés, depresiones, soledad, maltrato, Incomunicación y pérdida de valores esenciales como el respeto.

Volviendo al 2º tipo… Se trata de una impotencia algo más constructiva que la anterior, puesto que esta no se resigna a pensar que la vida es así y nada puede hacerse para que sea de otra manera. Este tipo de impotencia, conecta realidades distintas pero que tienen mucho en común, y el resultado de ese mal sabor de boca interconectado, puede convertirse en un gran potencial de cambio y mejora de nuestro entorno.Hay muchas cosas que pueden hacerse sin la necesidad de irse muy lejos; como ORGANIZARSE Y MANIFESTARSE por lo que a uno le inquieta; Inestabilidad y precariedad laboral, incoherencia entre los salarios y la carestía de todo… REIVINDICAR unos medios de comunicación más transparentes y menos manipuladores y una TV de calidad , donde no haya lugar para la tele basura, o al menos que no sea esta la que predomine, PROTESTAR ante la comunidad médica por la desinformación sexual que no ayuda a la prevención de las ETS, DENUNCIAR Y CRITICAR todo lo que nos parezca injusto y grave desde lo local a lo global; publicidad sexista que fomenta la persistencia de los roles tradicionales y las desigualdades de género, además de ayudar a consolidar los cánones de belleza occidentales ejm: delgadez extrema. Autoorganizarse en los barrios para RECLAMAR todo lo reclamable. Empezando por los espacios públicos que no estén condicionados por regulaciones estatales o mercantiles, sino que puedan abrirse a la creatividad y capacidad organizativa que nace de las redes sociales. OPONIENDONOS así al individualismo imperante que tiene que ver con la progresiva pérdida de dichos espacios públicos. Se trata de ARTICULAR procesos de encuentro y organización para construir movimientos sociales capaces de contraponerse y producir alternativas ante este modelo neoliberal capitalista basado en la especulación, la precariedad , la privatización de lo público y la uniformización del pensamiento impuesto por aquell@s que detentan el poder político y económico.
Retomo ahora la cuestión migratoria, como ejemplo de una realidad relacionada con nuestra vida cotidiana. La relación es muy simple;



TODOS QUEREMOS VIVIR DE LA MANERA MÁS DIGNA POSIBLE.


Y si en el camino de la vida entera, ya pase por Alemania o por Antequera,
solo encontramos; Apariencia, VANIDAD, rechazo, FALSEDAD, egoísmo, CALAMIDAD… Y pocas o ninguna mano tendida, SOLIDARIDAD, cariño, AMISTAD, empatía,HERMANDAD
EnToNcEs…………………………………………………………………………………………………….................
NADA QUEDA YA

Cuantas veces no habréis escuchado comentarios de tipo; nos quitan el trabajo, solo vienen delincuentes, saturan la seguridad social, yo no le alquilo mi casa a un inmigrante, echan peste, moro mierda vete a tu país…

En cambio, no en tantas ocasiones se escuchan cosas positivas sobre lo que nos aportan estas personas. Básicamente, rellenan los vacíos que nuestra economía y estado de bienestar engañosamente sólido no alcanzan a cubrir (cuidan de nuestros mayores y de nuestros pequeños, cosechan nuestros campos, limpian nuestras casas…), lo anterior ha permitido la definitiva incorporación de la mujer al mercado laboral. En relación igualmente al estado de bienestar y lo que lo sustenta, los inmigrantes también han jugado un importantísimo papel. Resolviendo uno de los grandes problemas que acechaban a España hasta hace poco.Cuando nuestra pirámide poblacional que hace posible el relevo generacional se tambaleaba, teniendo una de las poblaciones más envejecidas y de los índices de natalidad más bajos de Europa (pk no estaba la cosa pá traer muchos churumbeles).Comenzaron a llegar cada vez más inmigrantes a nuestro país, muchos ilegales, otros muchos legales y cotizando como buen hijo de obrero a la seguridad social.Esto ha sido y sigue siendo así, hasta el punto en que los jóvenes de hoy, ya no tenemos que preocuparnos como hace algunos años por las pensiones de mañana. Han contribuido al mantenimiento y crecimiento de algunos sectores productivos. En concreto, la agricultura y la construcción, sectores estos que nos tocan muy de cerca a los almerienses y que conforman en buena medida la economía de la provincia ( el BOOM inmobiliario y agricola coincidió con el BOOM de la inmigración). Por todo ello, la inmigración ha tenido mucho que ver en el crecimiento del PIB nacional.

Algo que también está relacionado con la economía española y con la inmigración, es el fenómeno de la deslocalización, tan jugoso para las grandes empresas. No queremos inmigrantes pero si queremos plantar nuestras empresas en los países de origen de los inmigrantes, para poder así beneficiarnos de las ventajas fiscales y salariales de invertir en ellos y contratar mano de obra a 2 duros. Es nuestra manera hipócrita de contribuir a que se sigan perpetuando situaciones de pobreza y desesperación. Las mismas situaciones que dan lugar, a lo que muchos medios de comunicación han denominado “avalanchas” de inmigrantes (con todas las connotaciones del término).

Todo lo dicho hasta ahora, hace solo referencia a lo económico, porque parece que eso es lo único que capta la atención y las entendederas de gran parte de nuestra sociedad.Pero por supuesto, esa no es la única riqueza que estas personas nos pueden y han aportado ya. En el terreno social y cultural la cosa daría mucho de si. Solo bastaría con mirar un poco atrás y revisar de donde viene gran parte de nuestro vocabulario, gastronomía, costumbres, monumentos… para tragarnos muchas de nuestras palabras.Más de 80000 palabras del castellano proceden del árabe! Si dejásemos de empeñarnos en la diferencia, en lugar del parecido y lo común, probablemente nos replantearíamos si es mejor estar desunidos y enfrentados, o unidos y empoderados frente a lo que verdaderamente nos oprime a todos.

La inmigración, no es más que un síntoma más de lo debilitado que esta nuestro planeta.La tierra se pudre por dentro y por fuera, y los más desavenidos, vienen esperando ser acogidos. Huyen de huracanes, de guerras fatales, atrocidades…esperando encontrar libertades. Pero lo que muchos no saben cuando salen, es que aquí también huele a podrido y uno anda algo aturdido.

AMIG@S, creo que lo más importante es compartir la convicción de que transformando la realidad podemos ayudar a los actores de la sociedad a convivir armónicamente.Para ello, hay que pasar de ser actores secundarios a auténticos protagonistas de nuestras vidas, y combatir juntos esa odiosa sensación de que el guión siempre está escrito y nos manejan desde arriba. Esta sensación de la que hablo, es sin duda compartida por muchos y supone un gran freno para cualquier intento de cambio. Sin embargo, en nuestras manos está el que deje de ser así, al menos parcialmente.

domingo, 12 de octubre de 2008

Autolegitimación de pensamiento


Pocas veces las cosas son blancas o negras, yo creo más bien en los grises, en el sepia… en tonos más difuminados. Lo demasiado claro o lo demasiado oscuro, ES DEMASIADO PURO, tanto, que no admite matices.
Los matices son justos y necesarios.
Los matices pueden hacer salvar lo salvable o condenar lo condenable. Los matices… contextualizan…sensibilizan…relativizan
Los matices son útiles para entender lo abstracto o lo que parece complejo.
Los matices se tienen que hacer ver, porque su deber es siempre enriquecer.

Reflexiones pre-crisinianas


En este mundillo nuestro cargado personas y cosas, donde lo 2º gana terreno a lo 1º en importancia y valor. Las luchas sociales se multiplican, pero la mayor parte del tiempo quedan fragmentadas geográfica o sectorialmente. Ejm de ello ha sido la oleada de sucesivas manifestaciones y huelgas del mes de junio ( Transportistas, agricultores, pescadores…) Frente a un adversario cada vez más poderoso: “El capitalismo globalizado”, la gente sale a la calle presa de la indignación, el desconcierto, y la desconexión de realidades aparentemente diferentes. Cada grupo reivindica lo suyo en función de sus intereses no satisfechos, los unos a los otros se culpan mutuamente, pero pocos o ninguno se ponen en el pellejo del otro. La suma de frustraciones dispersas, se suma a la desinformación y manipulación por parte de los medios, además de al individualismo que se encarga de fomentar este sistema. Todo ello, nos nubla la vista y la capacidad de criticar, razonar y reivindicar con fundamento, vinculando las luchas personales y grupales con las lógicas económicas mundiales que son la verdadera fuente de nuestra precariedad socio-laboral.
Todo este trasfondo, que en lugar de distanciarnos, debería unirnos, queda enmascarado por un una sutil estrategia global más amplia que escapa a nuestras conciencias; jornadas laborales interminables que asfixian nuestra capacidad de analizar y conectar realidades, noticias no dadas o manipuladas, prensa rosa (vivimos vidas ajenas para enajenarnos de la propia), hipotecas que no dejan pensar en otra cosa que no sea trabajar para pagarlas, con la consiguiente angustia y estrés que conlleva el miedo a perder el empleo. Y por si fuera poco lo que tenemos que pagar, el poco tiempo que nos queda y dedicamos a ver la tele…entre salsa rosa y el diario de patricia…famosos consolidados o prefabricados que se gestan en; OT, Gran hermano, supermodelo 2008…y sus respectivos ligues, que se hacen más famosos a nuestra costa, todo el bombardeo publicitario que recibimos en los casi 20 minutos de anuncios, nos dice que nuestra barriga esta fuera de lugar, pero que con 5 productos de vitalinea + la gama de cremas reductoras redumodel, volverás a ser “normal e ideal”, que nuestra ropa es del año de la pera y estamos desfasados, que si estas depre tomes tauriton para ponerte contenton, que tu tono de móvil no mola y es preferible que mandes 8 mensajes al 7742 para conseguir el chikilicuatro y no seas el hazme reír de tu circulo…
Demasiadas exigencias absurdas, impuestas e interiorizadas, que no dejan espacio a la reflexión y a la capacidad de empatizar con los que sufren las consecuencias de su eterna lucha por conseguir la moderna uniformidad, ni muchos menos con los excluidos sociales de nuestras ciudades, ni con los del 3º mundo que no vemos, ni con los del 3º que están en el 1º empezando por abajo, huyendo de la misma lógica aplastante que todo lo rige.

*Escrito en junio del 2008, poco antes de que estallara la alarma de crisis a nivel mundial